"La voluntad nacional es una de las palabras de las que los intrigantes de todos los tiempos y los déspotas de todas las épocas han abusado más. Unos han visto su expresión en los sufragios comprados por algunos agentes del poder; otros en los votos de una minoría interesada o temerosa, y los hay, incluso, que la han percibido plenamente formulada en el silencio de los pueblos y han deducido que del hecho de la obediencia nacía para ellos el derecho de mando"

A.Tocqueville, "La Democracia en América"

viernes, febrero 29, 2008

ALEA JACTA EST

Hagan juego, señores.

La perplejidad y el estupor no nos permiten reaccionar. Y no me extraña. ¿Cuándo y por qué bajamos tanto la guardia para que esta caterva de ineptos fanáticos nos cogiera desprevenidos?
Y hay gente, según nos dicen mucha, que dice que el enemigo público ganó el debate...Sin que lenguadetrapo Rajoy me entusiasme nada, objetivamente le dió tal paliza que dificil es que vuelva a saltar a la lona. Y sin embargo el público se nos dice que le da por vencedor a los puntos, y eso que no se levanta del tapiz ....No me lo creo.
Puede que mi voluntarismo parezca infantil. Puede que lo sea. Y sin embargo lo asumo conscientemente como una oblación moral, como fundamento de mis principios: todo lo que aborrezco defiende una visión pesimista y derrotista de la realidad. Defiende el antiheroe y el nihilismo, la equivalencia moral y la alianza acojonada de incivilizados. Yo no, mi optimismo americano me obliga a creer que ZP no volverá a vencer. No.
Así lo afirmo y lo reitero.
En público.
Y si me equivoco, reconoceré mis escasas dotes de adivino, pero la realidad reconocerá mi elevada capacidad como profeta: si gana ZP, se acabó España y la libertad.
Lo que no quiere decir que vaya a morir todo eso pacíficamente. El primero que se defenderá seré yo.
Echémosle, basta ya de este arrogante zote.

4 comentarios:

pirx dijo...

Yo no me atrevo a tanto, no sé qué pensar. He escrito que percibo en el ambiente posibles movimientos sísmicos, pero no puedo anticipar -po el momento- de qué signo son. Puede pasar algo el día nueve, algún tipo de ruptura, de desgarrón, pero se hace difícil anticippar acontecimientos. Y me temo que a día de hoy los dos grandes partidos tampoco lo tienen muy claro, observo reacciones algo paranoicas en ambos, mucho nerviosismo.

Si pudiera distanciarme diría que está siendo una campaña -la primera que estoy siguiendo con atención- muy ilustrativa sociológicamente. Pero no puedo, hay demasidas cosas en juego. Hay un factor imprevisible y decisivo, las decisiones en una situación como la qué vivimos no tienen por qué ser racionales, más aun, se suelen caracterizan por su irracionalidad en muchos casos, y eso a veces suele reultar frustante. En cualquier caso, no quisiera confundir deseos con realidad, y esa imposibilidad de distanciarme quizá sea la que me impida ver las cosas con mayor nitidez, al menos en mi caso. Temo, eso sí, el acelerón final de los últimos días, si el PSOE no lo tiene claro apretará el aceñerador a fondo, y eso, me temo, lo saben hacer bastante bien.

El día nueve sucederá pase lo que pase algo importante, puede que sea un intedrludio de respiro, y quizá alguna posibilidad; o el momento adecuado para proclamar la República Independiente de Uno Mismo. Yo ya estoy redactando los artículos de mi Constitución (por si acaso).

Un saludo.

ludfranz dijo...

Estimado QRM: la izquierda no es pesimista sino optimista: progresismo, buenismo, pacifismo, optimismo antropológico, alianza de civilizaciones.

Saludos.

QRM dijo...

Estimado Ludfranz:
No es asi: la izquierda parte de un pesimismo antropológico oculto que le lleva a desconfiar del individuo y reclamar la intervención del estado para corregir los "vicios" del iconoclasta individuo. La izquierda ha usurpado el papel de religión oficial y necesita la apocalipsis (por ejmplo la mentira climática); necesita el miedo para imponerse, y el pesimismo y el derrotismo del antiheroe europeo (véase el cine europeo frente al héroe de las vaqueradas) son armas muy útiles para ello.
La libertad es una fuerza interior intolerable para estos talibanes.
Pirx: Yo también noto algo, como la calma que precede a la tormenta, y también tengo miedo de que mis ojos vean aquéllo que quiero ver.
Y desgraciadamente tenemos vecinos, así que sólos no vamos a poder vivir, es una lástima, amigo.

Un saludo.

Ludfranz dijo...

Tú lo has dicho, QRM: la izquierda es una religión apocalíptica y dogmática, y como tal es optimista. La izquierda dice: eliminad el mal y a los malos (derecha, capitalismo, moral "tradicional"), lo cual es factible ("otro mundo es posible"), y cuando sólo nosotros los progresistas gobernemos el mundo éste será un paraíso, porque nosotros somos buenos, prácticamente perfectos y nunca nos equivocamos.
El héroe tradicional es pesimista: lucha contra el mal, pero sabe que éste nunca será definitivamente vencido y es consciente de que también ha de luchar siempre contra su propia maldad y debilidad: sabe, a diferencia del progre, que es imperfecto y de que su bondad, su heroísmo, es precario y frágil.