"La voluntad nacional es una de las palabras de las que los intrigantes de todos los tiempos y los déspotas de todas las épocas han abusado más. Unos han visto su expresión en los sufragios comprados por algunos agentes del poder; otros en los votos de una minoría interesada o temerosa, y los hay, incluso, que la han percibido plenamente formulada en el silencio de los pueblos y han deducido que del hecho de la obediencia nacía para ellos el derecho de mando"

A.Tocqueville, "La Democracia en América"

sábado, enero 10, 2009

PREGUNTAS SOBRE LA CRISIS

Sobre la crisis tengo yo muchas dudas y sería el más feliz si algún economista me las contestase de forma convincente. Yo no lo soy, y supongo que los arcanos de esa oscura ciencia me son tan ajenos como es ajena la luz para el ciego de nacimiento. Sin embargo, no por ello dejo de preguntarme cosas, como no deja el ciego de preguntarse que será la luz, o el sordo qué será el ruido.

Una de las cuestiones que más me inquietan es el asunto del precio del dinero. Si el dinero es un bien escaso, ha de tener un precio, que resultaría del cruce de la oferta con la demanda. Sin embargo, desde hace decenios, los bancos centrales han venido influyendo en la determinación de ese precio no sólo en consideración al cálculo de la demanda de dinero, sino como mecanismo doble de control de la inflación y de estímulo económico.

Resulta que los últimos años, y aún ahora, tenemos tipos de interés negativos, es decir, por debajo de la inflación, lo que lógicamente es un estímulo invencible para el endeudamiento, con el riesgo que ahora comprobamos de que ese endeudamiento no esté respaldado por nada. Así, a través de lo que parece el simple fraude de curar una infección trucando el termómetro ha degenerado, como no podía ser menos, en una gravísima enfermedad. Yo siempre creí que la inflación era síntoma de ciertos acontecimientos económicos, no todos perniciosos pero en general sí viciados, y no el problema en sí, sino la consecuencia del problema.

Si algún miembro de economistas sin fronteras oye este mensaje de socorro, le agradecería mucho ciertas aclaraciones.

2 comentarios:

Tumbaíto dijo...

De seguro que usted encuentra al menos tan gracioso como yo esto.

QRM dijo...

Pues sí que tiene gracia. Claro que siendo de los últimos de la pirámidde como somos, y sabiendo lo que ocurrirá si todo sigue igula, tiene algo menos: seguir pagando para otros sin esperanza de futuro, maldita la gracia.